De acuerdo con lo informado por el periódico saudita Okaz, el Frente al Nusra, brazo armado de Al Qaeda, secuestró a tres miembros del grupo terrorista libanés Hezbollah en la región siria de Qalamoun.
Los militantes secuestrados son Hasan Mansour, Ali Husseini y Mohammad Abbas, informó el sitio libanés Daily Star. Hasta el momento, la organización extremista no se pronunció sobre lo sucedido.
Mientras se esperan mayores detalles sobre este secuestro, Bahréin culpó a Hezbollah de un ataque llevado a cabo este lunes, luego de que una explosión matara a un ciudadano local e hiriera a un hombre expatriado, según lo publicado por el Ministerio del Interior a través de Twitter.
Las tensiones han ido en aumento en la ciudad libanesa, que cuenta con una población de mayoría chiíta, pero cuyos gobernantes son musulmanes sunitas, luego del boicot llevado a cabo por la oposición el mes pasado.
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El ministerio tildó el ataque de "explosión terrorista" y señaló que la policía estaba en el lugar de la escena, en un pueblo al sudoeste de la capital Manama.
Por su parte, la oposición chiita Al Wefaq también condenó el ataque, según consignó The Jerusalem Post.
En otro hecho de violencia, el lunes un oficial jordano fue asesinado en el pueblo de Damistan, también al sudoeste de Manama, en un programa de intercambio de seguridad, indicó el Ministerio del Interior.
El cabo Ali Mohammad Ali fue asesinado en servicio por una bomba a control remoto, de fabricación local. El Ministerio de Relaciones Exteriores de Bahréin sostuvo que la bomba fue fabricada por Hezbollah.